1- Separar las claras y las yemas de los huevos. Poner el queso en un recipiente hondo y añadir el azúcar, las yemas, el agua de azahar y la ralladura de limón. Triturar con la batidora hasta obtener una crema y reservar.
2- Enmantequillar un molde y espolvorearlo ligeramente con un poco de harina.
3- Montar las claras a punto de nieve firme con una pizca de sal. Incorporarlas poco a poco a la crema de queso y mezclar todo con suavidad.
4- Verter en el molde, alisarlo con una espátula y hornealo 45 min a 180ºC. Antes de sacarlo, pincharlo a ver si está bien hecho.
5- Retirar el pastel del horno, dejar enfriar y desmoldar. Adornar con unas grosellas y unas hojas de menta.
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Información nutricional
- La
ricota es un producto lácteo similar al queso. De color blanco, sabor suave y textura blanda y granulosa, es un elemento crucial en la cocina italiana, empleándose para postres y platos salados por igual; es uno de los rellenos tradicionales para la pasta.
Raciones
4 personas
Tiempo de preparación
1 h
Dificultad
fácil